Clases individuales de Técnica Alexander

El trabajo individual de la Técnica Alexander se centra en lo que te pasa.

Te da soluciones.

Primero puntuales...
y después duraderas.

Por experiencia sé que dar clases individuales de Técnica Alexander es la mejor forma de aprender e interiorizar lo que te hace falta para recuperar el control de tu cuerpo. Puede parecer algo intenso y es que lo es. Pero es esa intensidad la que va a generar un cambio en ti.

En cada clase descubres cómo te estás moviendo y aprendes cómo podrías mejorar.

Esto te va a llevar a una situación más fluida y cómoda con tu cuerpo.

¿Qué vas a aprender en las clases de Técnica Alexander?

El trabajo de la silla

¿Cómo te sientas? ¿Cómo estás en la silla un rato? ¿Y si tienes que quedarte varias horas? En la silla vas a aprender la base del trabajo, descubrirás que haces y cómo lo haces cuando estás de pie, en la silla y en el movimiento entre una posición y la anterior. Trabajamos con el equilibrio, el movimiento, y la actitud que tienes ante las instrucciones que te voy dando.

El trabajo en el suelo

Desde la primera clase te voy a enseñar este trabajo. Es sencillo y potente. Una vez que lo has aprendido, es tu trabajo diario. Solo necesitas 10 o 15 minutos al día. Lo puedes hacer en cualquier momento y verás que vas a aprender a observar, permitir, recibir información desde dentro (tus sensaciones) y desde fuera (tus manos sobre el cuerpo, el suelo, tus sentidos)

Actividad entre clases

Te iré proponiendo pequeñas observaciones para practicar en la vida cotidiana. Con esto, aprenderás a recibir información varias veces al día, pero cada vez te llevará menos de un minuto; podrás practicar en momentos de quietud (conduciendo, en el transporte público, mientras subes en el ascensor, etc.) y, a medida que tu experiencia vaya ampliándose, en el movimiento.

¿Qué consigues con las clases de Técnica Alexander?

Mayor comodidad en el cuerpo, en el movimiento o en una posición cualquiera.

Una técnica que te ayudará a identificar un problema, buscar una solución e implementarla.

Te enseñaré a usar algunas herramientas sencillas y prácticas para poner en práctica en tu vida diaria.

Mayor capacidad de observarte y conectar tus pensamientos con tus músculos; esto te llevará a establecer un círculo virtuoso entre acción y pensamiento.

Tu respiración y tu postura mejorarán.

Aprenderás la práctica del semi supino

Un trabajo sencillo que no te exige posturas exigentes y difíciles de memorizar

¿Cómo es una clase de Técnica Alexander?

Las clases son sencillas, no hacemos posturas forzadas ni hay rutinas que aprender. Son clases individuales, ya que tus circunstancias, situación personal y cualidades son únicas; y tendrás una experiencia única y personal.

Uso mis manos para trabajar, con ellas recibo información de tu situación corporal. Y tú también recibes información a medida que las voy moviendo ligeramente y reajustando lo que veo que requiere cambio. Al mismo tiempo, te daré algunas instrucciones verbales y explicaciones sencillas que te permitirán entender el trabajo desde el principio.

Trabajamos movimientos sencillos en una silla: levantarse, sentarse, estar de pie, estar sentado. De esta forma vas a tener más conciencia de tus músculos, tus intenciones a la hora de moverte: tus hábitos. El movimiento, el equilibrio y la coordinación mejoran cuando trabajamos en la silla.

Trabajamos en una camilla: tú observas y yo te voy moviendo. Con este trabajo damos una oportunidad a que tengas más conciencia de lo que pasa debajo del nivel de la piel. Una vez que te enseñe este trabajo, es tu labor diaria. Es sencillo, eficaz y placentero.

Las clases duran entre 30 y 40 minutos. En cada clase trabajamos a dos velocidades distintas: lo que traes cada día y la evolución en el tiempo. En la Técnica Alexander, el tiempo corre a tu favor: tu conocimiento y experiencia se van enriqueciendo y llegará un momento en que tus clases sean ese lugar en el que aprendes a buscar la solución a los problemas que necesitas resolver.

Es normal que, después de la primera clase, las personas salgan relajadas, sintiendo que han crecido y que algo se ha despertado en su cuerpo. También es normal que los cambios que se han producido sean imperceptibles. Aunque así sea, los efectos son profundos y duraderos. Puesto que son clases individuales, el progreso también lo es; pero más pronto que tarde, notarás el cambio para bien.

Marta Barón. Profesora de Técnica Alexander en Madrid
Clase de Técnica Alexander en Madrid con Marta Barón
Clase de Técnica Alexander para músico en Madrid con Marta Barón
Clase de Técnica Alexander para el dolor en Madrid con Marta Barón

¿Por qué las clases de Técnica Alexander son individuales?

Cada persona es única. Por eso las soluciones también lo son.

En las clases nos interesa tu situación real, descubrir tus hábitos y buscar la forma de transformar lo que no funciona.

Soy una profesora especializada en buscar soluciones a tus dificultades. También te enseño la forma de implementarlas.

¿Para quien son las clases de Técnica Alexander?

Las clases de Técnica Alexander son para ti si quieres optimizar tu forma de moverte, tus mecanismos corporales como la postura, la respiración, el sueño, etc.. También son para ti si estás en alguno de estas situaciones:

Sientes dolor

En cualquiera de estas zonas: espalda, cuello, piernas, hombros. Puede ser dolor puntual, o crónico; que te inhabilite solo temporalmente o esté interfiriendo en tus actividades cotidianas. A menudo el médico no te ha dado un diagnóstico claro. En estos casos, la Técnica Alexander es de gran ayuda ya que lo normal es que sea la forma en que te estás moviendo la que está alimentando y cronificando el dolor.

Músicos, bailarines, actores, actrices, deportistas...

Si tu trabajo exige un uso concreto de tu cuerpo: profesionales de la música, la danza, el teatro o el deporte han usado esta técnica para mejorar su rendimiento, lidiar con el miedo escénico o resolver dificultades corporales variadas. Actualmente la Técnica Alexander forma parte de los planes de estudio del Conservatorio Superior de Música de Madrid, la ESMUC de Barcelona, Musikene en San Sebastián o la Escuela Superior de Música Reina Sofía. Se enseña en las principales escuelas de música del mundo: Julliard School de Nueva York, Guildhall School of Music and Drama de Londres, etc..

Estrés

Estrés en el entorno laboral y prevención de riesgos laborales. Si trabajas en un entorno de oficina, necesitas estar muchas horas al día en la silla y con un ordenador delante, ya sabes lo complicado que es. La postura repetitiva del uso de manos y brazos sobre el teclado y pantalla, junto al estrés que a menudo se vive en los trabajos, pueden ser responsables de situaciones de dificultad corporal que se pueden resolver con un poco de trabajo.

Mujeres embarazadas

Puesto que la Técnica Alexander se especializa en el cambio y acomodar los cambios de la vida, si estás embarazada, será una gran ayuda para que tu embarazo sea lo mejor posible. Será una herramienta cotidiana que te ayude con los cambios que vas experimentando cada mes.

Personas curiosas

Tienes curiosidad e interés en tu cuerpo, en tu mente y en optimizar cada día tu respuesta a las necesidades que tienes. Si tienes preguntas sobre tu forma de funcionar, como ser humano y persona individual, la Técnica Alexander te va a proporcionar muy buenas respuestas. Pero también otras preguntas que no te habías planteado. Y todo esto desde un nivel de disfrute de la experiencia corporal bastante único.

Mis alumnas y alumnos cuentan su experiencia con la Técnica Alexander

P.P.E.B. Músico

La Técnica me ha enseñado a usarme de la mejor manera posible y a canalizar la energía necesaria en mi día a día, tanto física como intelectualmente. Para mí lo mejor es que la Técnica es global: no se utiliza exclusivamente para hacer algo, ni en un lugar determinado sino para todo lo que haces en tu vida. Tanto en actividades muy específicas como para las más comunes.

Tengo una anécdota de cuando empecé a recibir clases con Marta: soy músico y toco un instrumento; fue por ese motivo por el que me acerqué a la Técnica. En una de las primeras clases le pregunté a Marta cuando llevaría el instrumento a clase a lo que ella me respondió que más adelante. Unos meses más tarde comprendí que nunca llevaría el instrumento a clase porque todo lo que se trabaja en clase se hace de manera global y no particular. Y que me serviría lo mismo para mi instrumento como para las demás actividades que realizo durante el día.

Sara L. Veneros, Cantante y Guitarrista

Definitivamente, la Técnica Alexander ha supuesto un punto de inflexión en mi vida, tanto en el terreno artístico como en el personal (que para mí son lo mismo). Estoy inmensamente agradecida al trabajo con la Técnica y más concretamente a Marta Barón por haberme ayudado a ir eliminando poco a poco mis bloqueos y a sacar lo mejor de mí de una manera muy natural (y sin juicios) y eso se ve reflejado en los escenarios y en mi vida cada vez más. A lo largo de mi trayectoria he conocido muchas otras técnicas, pero, para mí, esta es la que más se adapta al mundo real en el que nos movemos y la que siento que más me ha ayudado. Recomiendo la Técnica y, en concreto, a Marta (por su gran implicación con la Técnica, consigo misma y con sus alumnos), a todo aquel que desee desarrollar su máximo potencial y lograr una vida más plena.

Cesar Pérez Nieto, Operario de grúa y deportista popular

La Técnica Alexander apareció en mi vida hace, aproximadamente, 7 años a través de mi hermano. Él llevaba un tiempo sufriendo una serie de dolencias en la espalda y tras buscar muchas alternativas decidió probar con la Técnica... lo que nos llevó a tener varias conversaciones en las que mi hermano me notaba muy interesado... un GRAN día tuvo la genial idea de regalarme una clase... y ese día conocí a Marta y fue un punto de inflexión en mi vida... el resultado de disfrutar de su regalo se tradujo en recibir unas 70 clases más, todas y cada una de ellas convertidas en una experiencia fascinante y que además me eran de gran utilidad tanto en mi práctica deportiva (carreras de larga distancia, natación, bicicleta...) como en mi vida cotidiana... y por supuesto que me acompaña en la actualidad... ¡Un grandísimo regalo de la vida, un millón de gracias Juan Carlos, un millón de gracias Marta!!!

Débora Altit. Profesora de yoga y Terapeuta psicocorporal

Comencé a trabajar con Marta porque una alumna suya me habló de ella, comentándome que le había ayudado a deshacerse de su dolor crónico. Yo llevaba con dolores en una cadera desde hacía uno o dos años, lo que me obligaba a ir al fisioterapeuta cada dos o tres semanas... Me quedaba mejor, pero luego el dolor siempre volvía. Para mí era evidente que estaba haciendo algo con mi cuerpo que producía ese dolor, algún tema postural o en mi movimiento me producía los dolores, que me aparecían sobre todo cuando caminaba... Pero ni fisioterapeutas ni osteópatas sabían darme una solución. Así que me decidí a trabajar con Marta, sabiendo que sería un trabajo largo, porque la velocidad del cuerpo es diferente a las prisas de nuestra mente... Pero para mí está bien que así sea, la transformación es más segura, más estable.

Recuerdo el primer día que fui a su escuela, cuando me abrió la puerta. Me llamó la atención la sensación física, casi tangible de solidez que transmitía, de estar bien plantada sobre sus pies. Y ahí comenzó nuestro viaje juntas, que duró cada semana durante cerca de tres años (y se me quedó corto). El dolor de cadera se quitó al cabo de un par de meses, sorprendentemente rápido para mis expectativas, pero sabía que en realidad ése sólo era el principio hacia algo más profundo e íntimo conmigo misma. Cada sesión era una sorpresa, era una meditación somática, sutil. Por mi formación y curiosidad hacia lo corporal, quería estar muy atenta a lo que Marta hacía o decía, y una de los aspectos que más me maravillaba es que con indicaciones tan pequeñas pudieran ocurrir tantas cosas en mi cuerpo. Solía llegar agotada (en aquel entonces estaba viviendo un momento vital muy demandante física y emocionalmente), y salía con una calma, una frescura y una sensación de estabilidad y centramiento que hicieron que nuestro encuentro semanal se convirtiera en un autorregalo, en uno de los momentos más esperados de la semana.

Gracias Marta por tu presencia y acompañamiento durante el proceso y gracias por hacerme conocer la Técnica Alexander desde la pasión, el compromiso y la integridad que transmites.

CLASES INDIVIDUALES
Técnica Alexander

¿Cuándo?

En cualquier momento solicitando cita previa.

¿Cuánto dura una clase?

Entre 30-40 minutos

¿Con qué frecuencia tengo que dar clases?

Es recomendable dar al menos una clase a la semana

¿Qué necesitas?

Nada, solo ropa cómoda.

¿Las clases implican alguna dificultad?

El trabajo es sencillo y fácil y cualquiera puede hacerlo.

¿Dónde lo haremos?

En Madrid, zona Plaza Castilla. Recibirás la dirección completa al reservar tu clase.

¿Cuánto cuesta?

Las clases individuales tienen un coste de 50€ por clase. Consulta conmigo cualquier duda que tengas.

Reservar una clase individual

Completa el siguiente formulario y me pondré en contacto contigo para acordar nuestra primera clase.

Responsable y destinatario: Marta Barón +infoDestinatario: Raiola Networks +infoLegitimación: Consentimiento del interesado +info. Fin del tratamiento: gestionar inscripciones y reservas, responder a consultas y comentarios +infoDerechos: A acceder, rectificar y suprimir los datos, así como otros derechos detallados en la información adicional +infoInformación adicional: Disponible la información adicional y detallada sobre la Protección de Datos Personales aquí +info.

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